¿Cómo funciona el ozono?
Compartir
El ozono es una molécula reactiva que tiene la propiedad de unirse a enlaces moleculares dobles y triples. Debido a su reactividad e inestabilidad, el O3 puede inactivar microorganismos, estimular el metabolismo del oxígeno en los tejidos, oxidar ciertos mediadores proinflamatorios y liberar factores de crecimiento en las plaquetas.
Por lo tanto, el ozono se utiliza en varios niveles.
El uso terapéutico del ozono en medicina veterinaria puede adoptar diferentes formas: uso tópico mediante la aplicación de aceite ozonizado o mediante la técnica de embolsado , que permite que la zona a tratar entre en contacto con el ozono gaseoso.
Sin embargo, el ozono también puede administrarse por vía intravenosa, intratumoral o mediante insuflación rectal o vaginal. Numerosos estudios informan sobre los beneficios de la ozonoterapia. Todos estos estudios son recientes y su uso terapéutico aún se encuentra en sus primeras etapas.
Sin embargo, las propiedades del ozono se conocen desde hace mucho tiempo.
El ozono posee un potente poder antiséptico, demostrado desde hace décadas. Se utiliza desde el siglo XX para la desinfección del agua potable en Europa. Un estudio muestra que tiene el mismo poder antiséptico que la clorhexidina, sin sus efectos citotóxicos nocivos (6). Su mecanismo de acción es el siguiente: al entrar en contacto con la pared celular bacteriana, el ozono oxida los fosfolípidos y las lipoproteínas, lo que provoca la inestabilidad de dicha pared. El ozono penetra entonces en la bacteria y causa la oxidación de las glicoproteínas y los glicolípidos en el citoplasma, lo que bloquea la actividad enzimática y conduce a la muerte de la bacteria.
El ozono también es eficaz para eliminar virus, hongos y protozoos. Además, actúa indirectamente estimulando la respuesta inmunitaria: aumenta el número de leucocitos, estimula la capacidad fagocítica de los granulocitos, facilita la formación de monocitos y activa los linfocitos T. Desencadena la liberación de citocinas que estimulan un mecanismo de citotoxicidad celular dependiente de anticuerpos (7). (2)
Esto da como resultado la angiogénesis (formación de nuevos vasos sanguíneos) y la regeneración de los tejidos.
" El ozono es útil para reducir la inflamación y el dolor, particularmente en casos de artritis. Actúa reduciendo la expresión de citocinas proinflamatorias y activando la interleucina 10 antiinflamatoria (9). También actúa oxidando el ácido araquidónico, las prostaglandinas y sus derivados, que contribuyen a mantener la inflamación (5)."
Se ha demostrado que el aceite ozonizado acelera la cicatrización de heridas. El ozono estimula la angiogénesis y activa reacciones biológicas y enzimáticas que favorecen la oxigenación de los tejidos, en particular mediante la producción de factores de crecimiento endotelial. El ozono también induce la migración de fibroblastos, lo que permite un cierre más rápido de la herida (6). (2)